lunes, 31 de diciembre de 2018

Aleksandr Solzhenitsyn






Aleksandr Isáyevich Solzhenitsyn, (Алекса́ндр Иса́евич Cолжени́цын), nació en la ciudad norcaucásica de Kislovodsk el 11 de diciembre de 1918 en plena guerra civil rusa. Su padre, Isaakiy Semyonovich Solzhenitsyn, era un joven oficial del Ejército Imperial Ruso, de origen cosaco. Su madre, Taisiya Zakharovna Shcherbak, era de ascendencia ucraniana e hija de un rico terrateniente que, partiendo de unos comienzos humildes, consiguió hacerse con una inmensa propiedad en el sur de Rusia. Ella fue enviada a Moscú para iniciar sus estudios de Filología y conoció a Isaakiy. Él fue destinado al frente alemán en Artillería, luchó durante toda la contienda y recibió tres condecoraciones (que Taisiya tuvo que enterrar por miedo a que las descubriesen los comunistas). El 15 de junio de 1918, a los dos meses del embarazo de Taisiya, falleció Isaakiy por un disparo accidental en una cacería y en 1924 la familia se trasladó a la ciudad de Rostov del Don. Aleksandr fue educado por su madre viuda y una tía, en condiciones penosas, propias de los primeros años del afianzamiento del comunismo y de la destrucción de todo vestigio de la vieja sociedad rusa. De 1926 a 1936 Aleksandr asistió a la escuela número 15 (Malevich).

Por temor, sobre todo, a una posible severidad del padrastro con Aleksandr, Taisiya no se volvió a casar. Estuvieron viviendo en Rostov diecinueve años, de los cuales quince no pudieron obtener una habitación del Estado, viéndose obligados a alquilar, a muy alto precio, una parte de una cuadra mínimamente arreglada en casas particulares destartaladas. Carecían de agua corriente y se calentaban con carbón, en las pocas veces que lo conseguían. Taisiya, que hablaba bien francés e inglés, trabajaba como mecanógrafa y taquígrafa, pero, por su procedencia social, no era admitida en los organismos que pagaban mejor. De vez en cuando las autoridades hacían una purga en todas las oficinas y la despedían reduciéndole sus derechos para futuros empleos. Esto le obligaba a buscar trabajos extra por las noches y a hacer sus labores domésticas ya de noche, sin dormir nunca lo suficiente. En esas condiciones se resfriaba a menudo, enfermó de tuberculosis y murió a los cuarenta y nueve años. (Su hijo no podría asistir al funeral porque se hallaba en el frente como oficial del ejército Rojo durante la Segunda Guerra Mundial).

A los 12 años Aleksandr vio cómo la propiedad familiar se convirtió en granja colectiva del Gobierno. Taisiya fomentó a su hijo el interés por la Literatura y lo educó en la religión ortodoxa rusa. Sin embargo, bajo la influencia de la escuela, Aleksandr adoptó en 1936 la ideología comunista y se unió al Komsomol, organización juvenil del Partido Comunista de la Unión Soviética.

En ese mismo año, Aleksandr Solzhenitsyn, no queriendo hacer de la literatura la principal materia, se matriculó en la Facultad de Física y Matemáticas de la Universidad Estatal de Rostov. Y en 1939 estudió por correspondencia cursos de Filosofía impartidos por el Instituto moscovita de Filosofía, Literatura e Historia. Siendo todavía estudiante se casó el 7 de abril de 1940 con Natalia Alekséyevna Reshetóvskaya. En 1941 Solzhenitsyn se graduó con honores, galardonado con la calificación de científico de grado II en Matemáticas y con la recomendación del Decano para ejercer la docencia como profesor adjunto.

Tras la invasión nazi en junio de 1941, Solzhenitsyn no fue movilizado de inmediato, porque los médicos militares lo calificaron como "parcialmente apto” y en septiembre de ese año fue enviado, junto con su esposa, como maestro de escuela a Morozovsk (Rostov). Sin embargo, el 18 de octubre fue convocado por la Comandancia Militar y destinado al 74º Batallón de Transportes y Caballería. 

A su solicitud, en abril de 1942 Solzhenitsyn fue admitido en la Escuela de Artillería de Kostroma y en noviembre, con el grado de teniente, se incorporó en Saransk al Regimiento de Reserva de Reconocimiento de Artillería como paso previo a la División de Reconocimiento de Artillería Instrumental. En marzo de 1943 fue puesto al mando de la 2ª Batería de Reconocimiento dentro de la División de Artillería del Ejército Rojo en los frentes Central y de Bryansk. En agosto de ese año le conceden la Orden de la Guerra Patriótica de 2º grado por su destreza en detectar la posición de los cañones enemigos e identificar otras tres baterías camufladas en el sector Malinovets-Setukh-Bolshoi. El 7 de mayo de 1944 Solzhenitsyn es ascendido a capitán y el 8 de julio siguiente es condecorado con la Orden de la Estrella Roja. 

Solzhenitsyn relataría en su novela incompleta “¡Amor a la Revolución!” y en su poema titulado “Nochas Prusianas” los crímenes de guerra que presenció durante la campaña contra la población civil cometidos por las tropas soviéticas, que robaban a los civiles sus escasa provisiones y violaban a las mujeres hasta matarlas, lo que le hizo cuestionarse el fundamento ético del régimen soviético. 

Solzhenitsyn participó en la Batalla de Kursk, la mayor batalla de tanques de la historia, más de 6300, con el apoyo de 4400 aviones y con más de tres millones de soldados de infantería. La operación, considerada una de las batallas más grandes de la historia, fue la ofensiva estratégica final que los alemanes pudieron lanzar en el Frente Oriental, pero ante el inicio de la invasión aliada en Sicilia, Hitler canceló la ofensiva en Kursk después de solo una semana, causando grandes pérdidas de hombres y tanques de Alemania y aseguraron que el Ejército Rojo disfrutara de la iniciativa estratégica para el resto de la guerra. 

Pero poco antes de que empezara la ofensiva final del Ejército soviético que acabaría en Berlín, Solzhenitsyn fue detenido por el Departamento de Contraespionaje SMERSH (СМЕРть Шпионам o Muerte a los Espías) el 9 de febrero de 1945 en las trincheras por orden de sus superiores, que habían detectado una crítica a la política de Iósif Stalin en una carta, supervisada por el Servicio Secreto, que Solzhenitsyn dirigía a su amigo Nikolai Vitkevich, comparando el sistema soviético con el régimen de servidumbre en la época imperial rusa, al ver la vida de los campesinos en su avance por el frente.

Solzhenitsyn fue llevado a la prisión de Lubianka en Moscú, en cuyos muros pudo escuchar los vítores del exterior celebrando la rendición de Alemania el 9 de mayo de 1945. El 7 de julio Solzhenitsyn fue condenado in absentia a ocho años de reclusión en campos de trabajos forzados y al "exilio eterno" al final del cumplimiento de la sentencia por “actividades subversivas y propaganda antisoviética”. En agosto, fue enviado al campamento Nueva Jerusalén. El 9 de septiembre fue trasladado a un campamento en Moscú, cuyos presos se dedicaban a la construcción de edificios residenciales en Kaluga. En septiembre de 1946 fue enviado a la sharaska (oficina de diseño cerrada donde trabajaban científicos e ingenieros presos) de la fábrica de motores de aviación de Rybinsk y cinco meses después, en julio de 1947, a la sharashka de Marfin, en las afueras de Moscú, donde trabajó como matemático. 

En diciembre de 1948, su esposa se divorció de Solzhenitsyn en ausencia, porque las esposas de los prisioneros políticos se enfrentaban a la pérdida de su puestos de trabajo o del permiso de residencia. 

El 19 de mayo de 1950, Solzhenitsyn fue trasladado a la prisión de Butyrka por un enfrentamiento con las autoridades de la sharashka y en agosto al campamento de trabajos forzados en la región minera de Ekibastuz, en la parte centroasiática de la Unión Soviética. Su vida en este campamento quedará reflejada en “Un día en la vida de Iván Denísovich”. En el invierno de 1952 a Solzhenitsyn le fue diagnosticado una neoplasia testicular de la que fue operado en el mismo campamento.

El 13 de febrero de 1953 Solzhenitsyn fue liberado, pero por su condena de destierro perpetuo no pudo regresar a la parte central del país. Fue enviado  a la aldea de Berlik, al sur de Kazajistán, donde trabajó como profesor de matemáticas y física en los grados 8-10 de la escuela secundaria local que lleva el nombre de Kirov. La vida de Solzhenitsyn en la región de Vladimir quedó reflejada en la novela “La Casa de Matriona”. A fines de 1953, su salud se deterioró considerablemente, el examen reveló un tumor canceroso, en enero de 1954 fue enviado a Tashkent para recibir tratamiento, y en marzo fue dado de alta con una mejoría significativa. La enfermedad, el tratamiento, la curación y las impresiones hospitalarias formaron la base de la novela “Pabellón del Cáncer", redactada en la primavera de 1955. Solzhenitsyn compara el cáncer que sufre el paciente con el estado policial que alcanza Rusia.

En junio de 1956, y por decisión de la Corte Suprema de la URSS, a Solzhenitsyn le fue condonado su exilio eterno "ante la ausencia de un corpus delicti en sus acciones”. Y en agosto, regresó del exilio en Rusia Central. El 2 de febrero de 1957 vuelve a casarse con su antigua esposa, Natalia Reshetovskaya. Desde julio de 1957 vivieron en Ryazan, donde Aleksandr Solzhenitsyn trabajó como profesor de Física y Astronomía en la escuela secundaria n. ° 2.

Gracias al deshielo provocado por la denuncia del estalinismo realizada por Nikita Jrushov en el XX Congreso del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS), el poeta Aleksandr Tvardovski, director de la revista literaria, Novy Mir (Nuevo Mundo), se atrevió a publicar en noviembre de 1962 la primera novela de Solzhenitsyn “Un día en la Vida de Iván Denísovich”, que tuvo una gran acogida tanto en la Unión Soviética como en el extranjero. Este relato de Solzhenitsyn narra la historia de Iván Denísovich Shújov, campesino y ex combatiente de la Segunda Guerra Mundial. Después de evadir el cerco alemán y regresar a su unidad, fue acusado de espionaje y traición y enviado a un campo de concentración soviético para cumplir una condena de ocho años. Solzhenitsyn describe una jornada del prisionero minuto a minuto: cómo consigue la comida, se protege del frío, cómo es su trabajo de albañil y las relaciones con los demás presos. Aparentemente Iván está humillado pero en realidad mantiene el orgullo, la sabiduría y la dignidad que le permiten establecer y preservar su propia escala de valores humanos y, por consiguiente, sobrevivir en el gulag.

El 30 de diciembre de 1962, Solzhenitsyn fue admitido en la Unión de Escritores de la URSS. Poco después, la revista "Nuevo Mundo” publicó “La Casa de Matriona”  e "Incidente en la estación Krechetovka”. El 28 de diciembre de 1963, los editores de la revista Nuevo Mundo y el Archivo Central Estatal de Literatura y Arte Estado presentaron “Un día en la Vida de Iván Denísovich” al Premio Lenin de 1964, pero el Comité de Premios la rechazó. 

En el otoño de 1964, la obra “El Ingenuo y la Complaciente” fue aceptada para su representación en el Teatro Lenin Komsomol de Moscú. La obra "Niñas" fue llevada al extranjero como samizdat (copia rudimentaria clandestina) y publicada en Frankfurt bajo el título "Estudios y cuentos". Fue la primera publicación en la prensa rusa en el extranjero sobre un trabajo de Solzhenitsyn, rechazado en la URSS.

El 11 de septiembre de 1965 la KGB llevó a cabo un registro en el apartamento de un amigo de Solzhenitsyn, V.L. Teusha, a quien Solzhenitsyn había confiado parte de su archivo con sus trabajos más antisoviéticos. Se incautaron los manuscritos de poemas, "En el primer círculo", "El mínimo", las obras de teatro “La República del Trabajo” y “La Fiesta de los Ganadores”. El Comité Central del PCUS publicó una edición restringida para la élite de la sociedad soviética (la nomenclatura) y Solzhenitsyn presentó una queja por la extracción ilegal de manuscritos ante la ministra de Cultura, P. Démichev, y el Secretario del PCUS, Leonid Brezhnev. Desde que este último llegó al poder, Solzhenitsyn prácticamente perdió la capacidad de publicar y hablar legalmente. 

Sin embargo, aprovechando una cierta inacción de las autoridades, en 1966 Solzhenitsyn comenzó actividades públicas activas (reuniones, discursos, entrevistas con periodistas extranjeros): el 24 de octubre de 1966, leyó extractos de sus trabajos en el Instituto de Energía Atómica Kurchatov y el 30 de noviembre por la tarde en el Instituto de Estudios Orientales de Moscú. Al mismo tiempo, comenzó a distribuir sus novelas "En el primer círculo" y “Pabellón de Cáncer en samizdat. Y en febrero de 1967, terminó en secreto el trabajo “El archipiélago Gulag”, que en su primera edición el autor presenta con estas palabras:

Con el corazón oprimido, durante años me abstuve de publicar este libro, ya terminado. El deber para con los que aún viven podía más que la obligación con los muertos.. Pero ahora la Seguridad del Estado se ha apoderado de él, no tengo más remedio que publicarlo inmediatamente. En este libro no hay personajes ni eventos ficticios. La gente y los lugares son llamados con sus propios nombres. Si son identificados por sus iniciales en vez de sus nombres, es por consideraciones personales. Si no son nombrados en absoluto, es sólo porque la memoria humana ha fallado al preservar sus nombres. Pero todo tuvo lugar tal y como se describe aquí. Dedico este libro a todos los que no vivieron para contarlo, y que por favor me perdonen por no haberlo visto todo, por no recordar todo, y por no poder decirlo todo.

"El archipiélago Gulag", compuesto en tres partes, es una novela basada en los testimonios de unos 227 ex-prisioneros de los campos de concentración soviéticos y en la experiencia vivida por el propio autor. Para los lectores el libro se convirtió en toda una enciclopedia costumbrista del trágico mundo de los prisioneros políticos de la URSS.

En mayo de 1967, Solzhenitsyn envió una "Carta al Congreso" de la Unión de Escritores de la URSS, que fue ampliamente conocida entre los intelectuales soviéticos en Occidente. Después de la "Carta", las autoridades soviéticas comenzaron a percibir a Solzhenitsyn como un oponente serio. 

En agosto de 1968, Solzhenitsyn conoció a Natalia Svetlova, con quien comenzó un romance. Solzhenitsyn comenzó a buscar el divorcio de su primera esposa, que con gran dificultad obtuvo el 22 de julio de 1972.

En 1968, cuando las novelas “En el primer Círculo" y “Pabellón de Cáncer" se publicaron en los Estados Unidos y Europa Occidental sin el permiso del autor, la prensa soviética lanzó una campaña de propaganda contra Solzhenitsyn y el 4 de noviembre de 1969, fue expulsado de la Unión de Escritores de la URSS, por denunciar que la censura oficial le había prohibido varios trabajos. 

Después de la exclusión, Solzhenitsyn comenzó a declarar abiertamente sus convicciones criticando duramente a las autoridades. En 1970, Solzhenitsyn fue nominado para el Premio Nobel de Literatura, pero declinó acudir a Estocolmo por temor de que las autoridades soviéticas no le permitieran regresar. El representante de la academia sueca tampoco pudo viajar a la URSS para entregar el premio: no le concedieron el visado. La ceremonia solemne en Estocolmo se celebró en diciembre de 1975, cuando Solzhenitsyn ya se encontraba fuera de su país.

Una poderosa campaña de propaganda contra Solzhenitsyn se organizó en los periódicos soviéticos, hasta la publicación en la prensa soviética de una "carta abierta a Solzhenitsyn” por Dean Reed. Las autoridades soviéticas instaron a Solzhenitsyn a que abandonara el país, pero él se negó. A finales de la década de 1960 y principios de la década de 1970, se creó una unidad especial en la KGB que se ocupaba exclusivamente de las actividades de Solzhenitsyn: la 9ª División de la 5ª Dirección. En agosto de 1971, la KGB llevó a cabo una operación para la eliminación física de Solzhenitsyn. Durante un viaje, en secreto, a Novocherkask, le dispararon un dardo que contenía una sustancia tóxica desconocida (presumiblemente ricina). El escritor sobrevivió, pero estuvo enfermo durante mucho tiempo.

En 1972, escribió “La Carta de Cuaresma” al Patriarca Pimen sobre los problemas de la Iglesia, en apoyo del discurso del Arzobispo de Kaluga. En los años 1972-1973 trabajó en la épica “Rueda Roja” y no realizó actividad disidente activa. 

En agosto de 1973, la relación entre el gobierno y los disidentes se agravó, lo que afectó a Solzhenitsyn. El 23 de ese mes Solzhenitsyn convocó a los corresponsales extranjeros. Y ese mismo día, la KGB detuvo a una de las ayudantes del escritor, Elisabeth Voronyanskaya. Durante el interrogatorio, se vio obligada a desvelar el paradero de una copia del "Archipiélago Gulag". De regreso a su casa, Elisabeth Voronyanskaya se ahorcó. Enterado Solzhenitsyn, ordenó imprimir el 5 de septiembre el “Archipiélago de Gulag” en París por la editorial de emigrados rusos YMCA-Press. 

Luego envió una “Carta a los líderes de la Unión Soviética”, en la que les instaba a abandonar la ideología comunista y tomar medidas para transformar la URSS en un estado nacional ruso. A partir de ese momento, la prensa occidental comenzó a publicar una gran cantidad de artículos en defensa de los disidentes y, en particular, de Solzhenitsyn. 

Y como reacción, la Unión Soviética lanzó una poderosa campaña de propaganda contra los disidentes y el 31 de agosto el  diario Pravda publicó una carta abierta de un grupo de escritores soviéticos acusando a Solzhenitsyn y al físico nuclear Andréi Sájarov de calumniar al Estado Soviético y su sistema social. El 24 de septiembre, la KGB, a través de la ex-esposa de Solzhenitsyn, ofreció al escritor la publicación oficial de la novela “Pabellón de Cáncer" en la URSS a cambio de que se abstuviera de publicar el “Archipiélago Gulag” en el extranjero. Solzhenitsyn ni se opuso a la impresión del “Pabellón de Cáncer" en la URSS, ni expresó su deseo de comprometerse con las autoridades. A fines de diciembre de 1973, se anunció la publicación del primer volumen del “Archipiélago Gulag”. En los medios soviéticos, una campaña masiva comenzó a denigrar a Solzhenitsyn como un traidor a la patria con la etiqueta  de “vlasolite literario”, en referencia al llamado ejército de Vlásov, formación militar rusa de voluntarios armados por la Alemania nazi contra la Unión Soviética. 

El énfasis de la campaña de difamación no se centró en el contenido real del “Archipiélago GULAG”, como estudio del sistema soviético de campamentos y prisiones de 1918 a 1956, sino en la solidaridad de Solzhenitsyn con los "traidores a la patria durante la guerra”.

El 7 de enero de 1974, se reunió el Politburó del Comité Central del PCUS para analizar la publicación del “Archipiélago Gulag “ y estudiar las medidas para "suprimir las actividades antisoviéticas" de Solzhenitsyn. Yuri Andropov propuso expulsar a Solzhenitsyn del país de manera administrativa. Brezhnev y Gromyko eran partidores de arrestarlo. Sin embargo, la opinión de Andropov prevaleció al final. Solzhenitsyn fue arrestado, acusado de traición y privado de la ciudadanía soviética. El 13 de febrero fue expulsado de la URSS embarcándolo en un avión con destino Frankfurt. Al día siguiente, el jefe de la Dirección General para la Protección de los Secretos de Estado en la Prensa ordenó retirar todas las obras de Aleksandr Solzhenitsyn de las bibliotecas y de la red de venta de libros. Las publicaciones se destruyeron "cortándolas en partes pequeñas", y de su destrucción se firmó el acta correspondiente, firmada por el jefe de la biblioteca y del personal que lo llevó a cabo. El 29 de marzo, la mujer y los tres hijos de Aleksandr Solzhenitsyn abandonaron la Unión Soviética, haciendo llegar al agregado militar estadounidense en Moscú el archivo y las condecoraciones militares del escritor.

Poco después de la expulsión, Solzhenitsyn hizo un viaje corto al norte de Europa, y como resultado decidió establecerse temporalmente en Zürich, donde buscó materiales sobre la vida de Lenin en el exilio con destino a la epopeya “La Rueda Roja”, se graduó y publicó un libro de memorias titulado “El Roble y el Ternero”.

En abril de 1975, hizo un viaje por Europa occidental con su familia, antes de trasladarse a Canadá y Estados Unidos. En junio-julio de 1975, Solzhenitsyn visitó Washington y Nueva York, donde pronunció discursos en el Congreso Sindical y en el Congreso de los Estados Unidos, criticando duramente el régimen y la ideología comunistas e instando a los Estados Unidos a abandonar la cooperación con la URSS, convencido de que Occidente sería un aliado en la liberación de Rusia del totalitarismo comunista. Al mismo tiempo, Solzhenitsyn temía que, en caso de una rápida transición a la democracia en la URSS, los conflictos étnicos pudieran brotar.

En febrero de 1976, realizó una gira por el Reino Unido, Francia y España cuatro meses después de la muerte de Franco. Hizo entonces unas declaraciones en Televisión Española cuando el régimen franquista aún estaba vigente sobre el papel, mientras el totalitarismo soviético no caería hasta 1991. He aquí algunas de sus manifestaciones: 

»Un español cualquiera no está vinculado a un lugar determinado, a una ciudad o a un pueblo donde tiene forzosamente que residir. Puede desplazarse de un lugar a otro según le plazca. Nuestro ciudadano soviético, en cambio, no lo puede hacer: estamos encadenados a nuestro lugar de residencia por la famosa propiska, el visado de la policía. Las autoridades locales deciden si puedo cambiar de residencia o no. Estoy totalmente en sus manos, pueden hacer conmigo lo que quieran.

»Luego me entero de que los españoles pueden salir libremente de su país. En la Unión Soviética esto no existe. Desde hace poco, bajo la presión de la opinión pública mundial, y especialmente de los Estados Unidos, se está dejando salir a una pequeña parte de los judíos. Pero la otra parte y todos los demás pueblos que habitan la URSS están privados de este derecho. Nos encontramos en nuestro propio país como en una cárcel.

»Paseo por Madrid, o por otras ciudades españolas, de las cuales he visitado doce, y veo que en los quioscos se venden los principales periódicos europeos. En cambio, si en mi país apareciera un periódico extranjero a la venta, se alargarían diez manos para agarrarlo. Veo, otro ejemplo, que aquí funcionan libremente las fotocopiadoras, cualquiera por cinco pesetas puede sacar libremente una fotocopia. En nuestro país tal cosa no sólo está prohibida, sino que es delito: toda persona que utilice una copiadora para fines particulares y no para el Estado, para la Administración, será condenado por actividades contrarrevolucionarias».

En abril de 1976, Solzhenitsyn se mudó a los Estados Unidos con su familia y se estableció en la ciudad de Cavendish en el Estado de Vermont, que le recordaba su patria. Retomó la redacción de la "Rueda Roja", desplazándose durante un par de meses al Instituto Hoover de la Universidad de Stanford para consultar el archivo de emigrados rusos.

Con el advenimiento de la perestroika la actitud oficial en la URSS hacia la creatividad y el trabajo de Solzhenitsyn comenzó a cambiar. Muchas de sus obras fueron publicadas. Y en 1989 la revista “Nuevo Mundo” publicó capítulos separados del “Archipiélago Gulag”. El 18 de de septiembre de 1990 la "Gaceta Literaria" y “Komsomolskaya Pravda” publicaron simultáneamente un artículo desarrollando los viejos pensamientos de Solzhenitsyn, expresados anteriormente en la "Carta a los líderes de la Unión Soviética”. El artículo tuvo una gran impacto en la Sociedad rusa. 

En 1990, a Solzhenitsyn le fue devuelta la ciudadanía soviética, se anuló su causa con la justicia soviética y en diciembre del mismo año se le otorgó el Premio Estatal de la Federación por su obra “El archipiélago Gulag”. 

En marzo de 1993, por decreto personal del presidente B. Yeltsin, le fue regalada la dacha estatal Sosnovka-2 en Trinity-Lykovo de 4,34 Ha. Solzhenitsyn diseñó y construyó allí una casa de ladrillo de dos pisos con un gran vestíbulo, una galería acristalada, una sala de estar con chimenea, un piano de concierto y una biblioteca. 

El 27 de mayo de 1994 Alexandr Solzhenitsyn y su familia emprendieron el viaje de regreso a la patria. Lo hicieron desde el Oriente Lejano ruso y con numerosas paradas en ciudades a lo largo de los diez mil kilómetros que recorrieron hasta Moscú. Solzhenitsyn dialogó con gente de diferentes edades y profesiones y compartió con ellos sus pensamientos, acercándose también a los problemas de la actualidad rusa.

En la estación Yaroslavl de Moscú, los comunistas lo recibieron con carteles de protesta: "Solzhenitsyn es el colaborador de Estados Unidos en el colapso de la URSS" y "Solzhenitsyn, fuera de Rusia”.

En Moscú el escritor obtuvo una tribuna para expresar sus ideas sobre el pasado, presente y futuro del país en uno de los canales de televisión con mayor audiencia de Rusia. Solzhenitsyn mantenía ahí una visión crítica tanto de la oposición comunista como de algunas de las reformas del presidente ruso Boris Yeltsin y en septiembre de 1995 el espacio fue clausurado

En 1997 fue elegido miembro de pleno derecho de la Academia de Ciencias de Rusia. En 1998 fue galardonado con la Gran Medalla de Oro de M.V. Lomonosov y en 2007 con el premio Estatal de la Federación Rusa por sus logros sobresalientes en el campo de las actividades humanitarias.

Poco después de que el autor regresase al país, se estableció un premio literario con su nombre para los escritores "cuyo trabajo tenga un alto mérito artístico, promueva el conocimiento ruso y haga una contribución significativa a la preservación y al desarrollo cuidadoso de las tradiciones de la literatura rusa”.

Aleksandr Solzhenitsyn pasó los últimos años de su vida en su apartamento de Moscú y en la dacha. A fines de 2002, sufrió una grave crisis hipertensiva, que sobrellevó escribiendo. Tras someterse a una operación, perdió la movilidad en su mano izquierda. Junto con su esposa Natalia Dmitrievna, como la presidente de la Fundación Alexander Solzhenitsyn, trabajó en la preparación y publicación de su colección más completa de 30 volúmenes de obras.

El 30 de agosto de 2008 Alexander Solzhenitsyn falleció por insuficiencia cardíaca aguda, a la edad de 90 años, en su dacha de Trinity-Lykovo. 

El 5 de agosto, en el edificio de la Academia Rusa de Ciencias, de la cual Solzhenitsyn era miembro de pleno derecho, se realizó un funeral civil, al que asistieron, entre otros, el ex-presidente de la URSS, Mijaíl Gorbachov, y el presidente del gobierno de Rusia, Vládimir Putin, así como figuras culturales rusas y varios miles de ciudadanos. Al día siguiente el arzobispo de Orekhovo-Zuevsky ofició el funeral en la Gran Catedral del Monasterio Donskoy de Moscú. El mismo día, los restos de Alexander Solzhenitsyn fueron enterrados con honores militares (como veterano de guerra) en la necrópolis del Monasterio Donskoy detrás del altar de la Iglesia de San Juan Climaco. El presidente ruso, Dmitry Medvedev asistió a la ceremonia fúnebre.

Así resumía Natalia Svetlova la vida de su marido: “Alexandr mantuvo una observación fija y constantemente atenta sobre la historia mundial y la historia de Rusia. Escarbaba incansablemente en materiales históricos. Creo que esta sed de averiguar, que estuvo alimentada por el amor hacia su patria y por la angustia por su futuro, le abría caminos para alcanzar revelaciones originales y a menudo intuitivas. No eran profecías, sino conclusiones y deducciones sobre el pasado y el futuro. A veces estas conclusiones resultaron acertadas”.

Otras obras de Aleksandr Solzhenitsyn:
  • Nunca cometemos errores (1963), novela
  • Por el bien de la causa (1964), novela
  • Agosto de 1914 (1971; revisada y ampliada en 1983), novela
  • Lenin en Zúrich (1975), ensayo
  • Los tanques conocen la verdad (1980), ensayo
  • Prisioneros (1983), ensayo
  • Noviembre de 1916 (1983), novela
  • Marzo de 1917 (1986), novela
  • Cómo reorganizar Rusia (1990), ensayo
  • Abril de 1917 (1991), novela
  • El problema ruso: al final del siglo XX (1992), ensayo
  • Rusia bajo los escombros (1992), ensayo
  • Los invisibles (1992), ensayo
  • El error de Occidente (1998), ensayo
  • Doscientos años juntos (1795–1995) (2001), ensayo



MAG/31.12.2018



miércoles, 5 de diciembre de 2018

Allen Ginsberg




Allen Ginsberg nació en el seno de una familia judía, el 3 de junio de 1926 en Newark (New Jersey), hijo de Louis Ginsberg, profesor de Instituto y poeta conocido, y de Naomi Ginsberg, inmigrante rusa, maestra de escuela, que entraba y salía del hospital psiquiátrico, aquejada de una psicopatía esquizoide. Naomi, de ideología comunista, acostumbraba a llevar a su hijo Allen a los mítines del partido. Allen pasó su infancia en el pueblo vecino de Paterson (New Jersey). 

En su adolescencia, comenzó a enviar cartas al New York Times sobre política, en relación a la Segunda Guerra Mundial, y sobre derechos de los trabajadores. Cuando entró en la Eastside High School comenzó a leer a Walt Whitman, humanista a medio camino entre el trascendentalismo y el realismo. En esos años, acompañaba a su madre en autobús con gran desazón a las terapias psíquicas, que quedaron reflejadas en su poema Howl (“El Aullido”). 

En 1943 se graduó y asistió por poco tiempo a la universidad pública de Montclair. En 1945 se enroló en la Marina Mercante para ganar dinero con que poder entrar en la  Facultad de Derecho de la Universidad de Columbia. Afortunadamente la Asociación de Jóvenes Hebreos de Paterson le concedió una beca. 

A poco de entrar en la Universidad de Columbia conoció a Lucien Carr, quien le presentó a un buen número de futuros escritores beat, entre ellos a Jack Kerouac, William S. Burroughs y John Clellon Holmes. Sintonizaron entre sí, puesto que se veían imbuidos de una excitación propia del potencial de la juventud estadounidense, que los posicionaba fuera de los límites conformistas de la era McCarthy. Ginsberg, más poeta, y Carr, más carismático, se entusiasmaban hablando de una “Nueva Visión” para la literatura y para su país.

Carr también le presentó a Neal Cassady de quien Ginsberg se encapricharía. El liderazgo de Carr terminó cuando cometió un asesinato y fue encerrado en un reformatorio. Cassady se convirtió en el nuevo catalizador de la Beat Generation, que rompió con la estética académica y llevó a cabo una auténtica revolución cultural claramente marcada por su denuncia del sistema de vida estadounidense. 

En 1957 Kerouac, otro de los beats, publicó una novela que llevaba por título On the Road (“En la carretera”), describiendo en su primer capítulo el encuentro entre Ginsberg y Cassady, donde veía a aquél como el ‘lado oscuro’ y a éste como el ‘lado de la luz’ en la “Nueva Visión”, influido quizás por la proximidad de Ginsberg al comunismo, del que Kerouac desconfiaba cada vez más. Aunque Ginsberg nunca llegó a ser miembro del Partido Comunista, Kerouac lo llama ‘Carlo Marx’ en su novela.

En la universidad Ginsberg escribió en el diario literario Columbia Review y en la revista humorística Jester. Ganó el premio de poesía Woodberry, fue el presidente del grupo de debate literario Philolexian Society y miembro del club de poesía Boar's Head Society. Allen Ginsberg seguía con especial interés el curso dictado por Lionel Trilling, miembro de The New York Intellectuals, grupo de escritores neoyorquinos, en su mayoría judíos, que se reunían para defender una política de izquierdas pero firmemente anti-stalinista.

Se acusó a Ginsberg de esconder objetos robados en su habitación en el campus universitario y se descubrió que encubría a un conocido. En el juicio él se declaró demente y fue enviado durante varios meses a un hospital psiquiátrico. Finalmente abandonó la Universidad de Columbia.

Mientras la nación trataba desesperadamente de capear el temporal en la era McCarthy, Ginsberg, Kerouac y Burroughs,  conocedor de cerca de los bajos fondos de Nueva York, veían necesaria una sociedad más atrevida y vibrante. Se lanzaron a la vida callejera y encontraron su inspiración en la música de jazz y la cultura que la rodeaba. Proclamaban la ruptura con los valores tradicionales y defendían el consumo de las drogas como medio de iluminación. Muchos los tildaban de irresponsables a la vista de su vestimenta descuidada y su lenguaje barriobajero. Era la semilla de una revolución que buscaba quitarse los grilletes de la vida social tranquila y aburrida de la posguerra. 

También en Nueva York conoce a Gregory Corso que escribía poesía en el Pony Stable Bar, donde le han dado empleo tras salir de la cárcel. Ginsberg confiesa se sintió inmediatamente atraído por él y por sus poemas para los que Corso estaba especialmente dotado.

En 1950 Kerouac comenzó a estudiar el budismo y compartió con Ginsberg sus conocimientos empezando por las Cuatro Nobles Verdades. Ginsberg viajó a la India con Gary Snyder quien previamente había estudiado en el Monasterio Zen de Kyoto y le cantó el Prajnaparamita que resonó en sus oídos hasta estimular su interés por las religiones orientales. Ginsberg visitó al Dalai Lama, al Karmapa y a Trungpa. Éste último se convertiría en su maestro y amigo. Ginsberg también se interesó por el Krisnaismo y solía cantar el mantra de Hare Krishna en sus rezos lo que le elevaba a un estado de éxtasis. Conoció a Bhaktivedanta Swami, fundador de este movimiento con quien estableció una fructífera relación religiosa viajando con él para promocionar la construcción de su primer templo. En 1967 participaría en el concierto de Baile Mantra-Rock celebrado en Avalon Ballroom de San Francisco e introdujo a Bhaktivedanta Swami en la Comunidad Hippie de Haight-Ashbury. Ginsberg trató de dejar el consumo de droga y el tabaco por motivos religiosos con escasa fortuna.

Ginsberg se trasladó a San Francisco donde conoció en diciembre de 1954 a Peter Orlovsky cuando éste trabajaba como modelo del pintor Robert La Vigne. Ginsberg se enamoró de Orlovsky, siete años más joven que él, manteniendo una relación sentimental abierta a lo largo de toda su vida.

Uno de los primeros productos de los Beats fue Howl (“Aullido”), el largo poema de Ginsberg publicado en 1956, donde se expresa en un lenguaje áspero una súplica de humanidad y liberación ante la intolerancia de una sociedad mecanizada y materialista. Su estilo rítmico pareció, a muchos de los poetas tradicionales, improvisado y al azar. Era, sin embargo, la voz de la época alejándose de las formas pasadas y de las reglas gramaticales sin sentido. Fue el detonante de la poesía beat, basada en un ritmo muy acentuado, con influencias del jazz, que convierten el poema en una especie de canto salmódico de gran fuerza expresiva. 

Por la franca aceptación de tabúes como la homosexualidad y el consumo de drogas, mostrada en el poema Howl (“Aullido”), el dueño de la editorial, City Lights de San Francisco, Shig Murao, fue encarcelado por obscenidad aunque se  le retiraron los cargos más tarde. 

En 1957 Ginsberg abandonó San Francisco en compañía de Peter Orlovsky e inició un periplo mundo adelante para recitar sus poemas, con barba de profeta, y trabajando en lo que se terciara. A lo largo de su vida visitó 64 países, entre ellos España dos veces en 1957 y en 1992. 

En su primer viaje aterrizó en Marruecos, donde permaneció poco tiempo para viajar a París, donde se encontraron con Gregory Corso que residía en una desvencijada pensión en el nº 6 de la Rue Gît-le-Coeur, hoy transformada en el Beat Hotel. Más tarde llegarían Burroughs y otros beats. Fue en esa pensión parisina donde Ginsberg comenzó a escribir su poema épico Kaddish, que publicó la editorial City Lights en 1961. (El kadish es uno de los principales rezos de la religión judía como panegírico a Dios para que acelere la Redención y la venida del Mesías).

Este segundo libro, Kaddish and other Poems (“Kaddish”), es probablemente su mejor obra, una confesión personal, casi catártica, que describe la proximidad de Ginsberg con su madre mientras era hospitalizada y luchaba contra la locura. La crudeza del tema y las emociones desesperadas de Ginsberg tienen un encaje perfecto en el poema Kaddish. Refiriéndose a él, su autor decía: “Me veía a mí, a mi madre y a la nación atrapados, desolados … recibiendo décadas de vida y mientras cantábamos los nombres de la Muerte en muchos mundos mentales, la búsqueda interna de la clave de la vida se encontraba finalmente en el nuestro”.

Durante los años 1962 y 1963 Ginsberg y Orlovsky recorrieron la India, deteniéndose medio año en Calcuta y Benarés. Hicieron amistad con prominentes poetas bengalíes como Shakti Chattopadhyay y Sunil Gangopadhyay. Ginsberg conoció también a un destacado político, Pupul Jakayar, quien evitó lo expulsaran del país al terminarse la validez de su permiso de residencia. En 1963 apareció su tercer libro de poemas, Sándwiches de realidad.

En mayo de 1965 Ginsberg llegó a Londres y se ofreció a leer sus poemas de forma gratuita. Pronto tuvo la oportunidad de una lectura en la librería independiente Better Books en el nº 94 de Charing Cross Road. El éxito fue descrito por el poeta estadounidense allí presente como: “Un momento muy significativo en la historia de Inglaterra o al menos de su poesía”. El 11 de junio la productora de cine Barbara Rubin, amiga de Ginsberg, organizó en el Royal Albert Hall la International Poetry Incarnation donde intervinieron una veintena de poetas, entre ellos Allen Ginsberg, William Burroughs y Gregory Corso. La audiencia superó las 7000 personas, entre las que se encontraba Indira Ghandi.

Ginsberg viajó a continuación a varios países comunistas para promover la libertad de expresión. Por su crítica a la política de persecución a los homosexuales y por calificar a Che Guevara de ‘lindo’, los cubanos lo expulsaron a Checoslovaquia donde a la semana de su llegada nombraron a Ginsberg ‘Rey de Mayo’. En su desenfrenada celebración con los estudiantes fue arrestado por consumo de drogas y mostrarse ebrio en público. La Agencia Estatal de Seguridad (similar a la KGB soviética) lo deportó poco después por moralmente peligroso. En 1966 realizó uno de sus tres viajes a Polonia de donde fue expulsado al publicarse su diario secreto.

Viajó a Rusia, donde se reunió con Joe Levy, un primo de su madre que le explicó que una parte de su familia fue deportada a la Unión Soviética por los responsables de Inmigración de Estados Unidos, que interpretaron que la calvicie podía ser una manifestación de enfermedad. 

Durante los años ’60, Ginsberg experimentó distintas drogas como LSD, peyote y marihuana, creyendo que bajo su influencia podría crear un nuevo tipo de poesía. De esta forma pretendía ampliar su conciencia al escribir con William Burroughs las Yage letters (“Las cartas de la ayahuasca”). 

Por  su entrega a las drogas ilegales y al sexo sin restricciones, una buena parte de la juventud de los EE.UU. veía en Ginsberg un símbolo de los movimientos de rebeldía en esa época. Él utilizó su popularidad en favor del cambio social. Acuñó la frase Flower Power (“La revolución de las Flores) para animar a los manifestantes de los años ’60 a que se uniesen en una revuelta pacífica. En 1967 durante el evento contracultural Human Be-In celebrado en el Parque de Golden Gate de San Francisco, Ginsberg cantó “Om” repetidamente por megafonía durante horas. Lo volvió a cantar en la Convención Democrática de Chicago un año más tarde y en 1970 en la reunión de los Panteras Negras en el campus de la Universidad de Yale.

En 1968 apareció un nuevo título Planet news. 

En la década de los ’70 Ginsberg sufrió dos pequeños infartos que derivaron en parálisis facial periférica y otras dolencias derivadas del stress causado por su apretada agenda.

En 1972 publicó The Fall of America: Poems of these States (“La caída de América”) por la que recibió dos años más tarde el Premio Nacional del Libro de Poesía.

En los ’80, Ginsberg ya era el poeta vivo más famoso de los Estados Unidos. Como escritor seguía publicando poesía con trasfondo personal y de reto y como celebridad mantenía su presencia internacional en su condición asumida de portavoz de la paz y la tolerancia, en sus papeles de profesor y conferenciante.

En 1984 se publicó el volumen Collected Poems, 1947-1980, recopilación de su obra. Y en 1986 le fue concedida la Guirnalda de Oro en el Festival Internacional de la Poesía en Struga (Macedonia), donde coincidió con otros ganadores del premio en ediciones anteriores, Bulat Okudzhava y Andrei Voznesensky.

En 1993 el Ministerio de Cultura de la República Francesa le nombró Caballero de las Artes y de las Letras.

A lo largo de esta última década de su vida, Ginsberg escribió y actuó al mismo ritmo desenfrenado de su juventud. Vendió millones de libros. Y contó entre sus colaboradores a miembros de los conjuntos musicales U2 y Sonic Youth. La música y el canto formaban parte en ocasiones de sus lecturas poéticas. Se acompañaba a veces de un armonio, que había comprado en Benarés cuando fue a visitar a los poetas bengalíes de la llamada “Generación hambrienta”, y de un guitarrista. En alguno de sus actos preguntaba si podía alabar al Señor e iniciaba su canto de Hare Krishna interpretándolo de la forma más sosegada posible.

En 1993 Ginsberg se desplazó al pueblo de Orono para rendir homenaje, en la Universidad de Maine, a Carl Rakosi, al poeta superviviente del Objetivismo, en su 90 cumpleaños. Quiso también en sus últimos años establecer un puente entre su movimiento beat de los años ’50 y los hippies de los años ’60, hermanándose con Timothy Leary, Ken Kessey y Bob Dylan. 

El 16 de diciembre de 1996, pocos meses antes de morir, Ginsberg pronunció su última conferencia en la librería Booksmith de Haight-Ashbury, en los alrededores de San Francisco. 

Tras volver del hospital por última vez, donde había sido tratado sin éxito de insuficiencia cardíaca, Ginsberg fue llamando, para despedirse, uno a uno a todos los que figuraban en su agenda telefónica. Johnny Depp contestó con sollozos y otros se mostraron optimistas. Ginsberg continuó escribiendo hasta el final de su enfermedad, el 30 de marzo, el poema "Things I'll Not Do (Nostalgias)”.

Allen Ginsberg falleció el 5 de abril de 1997, a la edad de setenta años, rodeado de familiares y amigos, en su apartamento en el East Village de la ciudad de Nueva York. Entre los que se desplazaron a prestarle sus respetos estaban Gregory Corso, Roy Lichtenstein y Patti Smith, entre otros.

Una tercera parte de las cenizas se enterraron en el panteón familiar en el Cementerio Gomel Chesed de Newark (New Jersey), otro tercio en el Centro Shambhala de las Montañas Rocosas, fundado por Trungpa en Colorado, junto a las de Peter Orlovsky, y el resto en los terrenos del lama tibetano Rinpoche en la India.

Un año después de su fallecimiento, un grupo de escritores se reunieron en la granja de Ginsberg como homenaje a Allen y los beatniks.

Allen Ginsberg ha sido una de las figuras más emblemáticas de la cultura alternativa norteamericana. Se hizo el alma de la Generación Beat, luchando sin descanso por la redacción y publicación de sus obras. Fue después figura prominente de la llamada «Revolución de las Flores» y el hipismo de los años sesenta, peleó contra la guerra y el racismo, difundió el rock, la alteración química y mística de los estados de conciencia como elemento cultural y se situó siempre en primera línea social y literaria, promoviendo las ideas libertarias y las nociones de espiritualidad y autenticidad, por lo que siempre estuvo en el punto de mira de las autoridades, especialmente en el del FBI. Fue siempre amigo de todos y ayudó a todos: financió e impartió clases y seminarios de estudios budistas en la Naropa University de Colorado y acompañó como rapsoda a Bob Dylan en su famosa gira con la Rolling Thunder Revue.

MAG/05.12.2018


lunes, 19 de noviembre de 2018

Herbert Marcuse






Herbert Hermann Marcuse nació el 19 de julio de 1898 en el distinguido barrio de Charlottenburg de Berlín, en el seno de una familia judía asimilada, de clase alta. Su padre, Carl Marcuse, nacido en Greiffenhagen, región de Pomerania (hoy Gryfino, en Polonia), era un hombre de negocios acomodado. Su madre, Gertrud Kreslawsky, nacida en Landsberg an der Warthe, provincia de Brandeburgo (actualmente Gorzów Wielkopolski, en Polonia) era hija de un rico empresario fabril, 12 años más joven que su marido. 

A los seis años, Herbert Marcuse entró en una exclusiva escuela pre-escolar, a los nueve ingresó en el Mommsen Gymnasium y a los once pasó al Kaiserin Augusta Gymnasium, todos ellos en su propio barrio. Era un voraz lector de los clásicos alemanes y de algunos autores de la literatura mundial. Le gustaba también el modernismo en el arte. En 1914 fue llamado a filas, pero detectado por los médicos militares un problema visual, evitó el frente y se le concedió una prórroga que Marcuse aprovechó parta completar su bachillerato (Reifeprüfung). Lo destinan a la División de Reserva nº 18, pero, ante su visión limitada, pasa a la Reserva Zeppelin y le conceden permiso para que asista a conferencias. A principios de 1918 Marcuse observa y simpatiza con la Revolución Alemana que obliga a abdicar al Emperador Guillermo II el 9 de noviembre estableciéndose un Gobierno Social democrático y, al día siguiente, la proclamación de facto de la República de Weimar.

La guerra y la Revolución Alemana inclinaron a Marcuse hacia el estudio del marxismo para poder entender “la dinámica del capitalismo y del imperialismo así como la quiebra de la Revolución Alemana”. Quería saber más del socialismo y de la teoría de Marx sobre la revolución pues no era capaz de identificarse con ninguno de los partidos de la Izquierda de la época. Poco tiempo tuvo para estudiar el marxismo, pues al ser licenciado del ejército en diciembre de ese año de 1918, se matriculó en la Universidad Humboldt de Berlín, donde estudió cuatro semestres en el curso 1919-1920 y otros cuatro el curso siguiente en la Universidad de Friburgo, donde se concentró en el  estudio de la literatura alemana, y las asignaturas de filosofía y economía política. Su tesis doctoral que presentó y defendió en 1922 trató sobre “El artista novel alemán” (Der deutsche Kunstlerroman). Claramente influenciada por la estética de Hegel y la teoría de la hermenéutica desarrollada por Wilhem Dilthey, quien afirmaba que “La vida es una misteriosa trama de azar, destino y carácter”. “El artista novel alemán” sería la primera de las obras de Marcuse comprometido siempre con la estética.

Completado su doctorado, Marcuse regresó Berlín donde su padre le facilitó un apartamento y entregó una acción en una empresa editorial de libros de anticuario. Trabajó principalmente como bibliógrafo e investigador. En 1924 contrajo matrimonio en Berlín con Sophie Wertheim, licenciada en Matemáticas, a quien había conocido en la Universidad de Friburgo. En 1928 nació Peter.

En 1925 Marcuse publicó una bibliografía de Schiller. En 1927 apareció la obra Sein und Zeit (“Ser y Tiempo”) de Martin Heidegger, que Marcuse leyó con gran interés cuestionándose el poder del arte como fuente cognitiva e instrumento de la liberación personal y cambio social, que él perseguía. Sintió la necesidad de profundizar en Filosofía que ya había estudiado superficialmente en el curso 1920-21 en la Universidad de Friburgo. Así pues, en 1929 los Marcuse regresaron a esta ciudad para que Herbert estudiase Filosofía con Martin Heidegger y Edmund Husserl. Fue entonces cuando nació su devoción por la Filosofía que acompañó a Marcuse a lo largo de su vida. 

En esta etapa en la Universidad de Friburgo trabajó como ayudante de Heidegger y preparó su disertación de acceso al profesorado con la tesis titulada Hegel's Ontologie und die Grundlegung einer Theorie der Geschichtlichkeit (“Ontología de Hegel y la Teoría de la Historicidad”), que se publicaría en 1932, aunque no llegó a ser aprobada por Heidegger, próximo al partido nazi. Marcuse comprendió que el avance del nazismo y su política antisemita le impedirían acceder al profesorado.

Cuando en enero de 1933 Hitler toma el poder, el filósofo judío Leo Löwenthal puso en contacto a Herbert Marcuse con Max Horkheimer, también filósofo judío, director del Instituto de Investigación Social de Frankfurt, IfS, en dependencia de la Universidad de Francfort. El IfS era el núcleo de la Escuela de Francfort, en la que un grupo de investigadores se adherían a las teorías de Hegel, Marx y Freud. Además de Max Horkheimer, eran miembros de la Escuela Leo Löwenthal, Theodor W. Adorno, Friedrich Pollock, Erich Fromm, Otto Kirchheimer y Franz Leopold Neumann. Tras ser entrevistado, y con el apoyo de Edmund Husserl y Leo Löwenthal, Marcuse fue contratado por el Instituto. 

Como miembro del Instituto de Investigación Social, Marcuse desarrolló un modelo de teoría de crítica social, creó una teoría de la nueva etapa del Estado y del capitalismo del monopolio, describió las relaciones entre filosofía, teoría social y crítica cultural y realizó un análisis y crítica del nazismo. Publicó su primera revisión completa de Ökonomisch-philosophischen Manuskripte aus dem Jahre 1844 (“Manuscritos Filosóficos y Económicos de 1844”) de Karl Marx, revisando la interpretación del marxismo desde el punto de vista de las primeras obras de Marx.

Ante el riesgo de que los nazis clausuraran el Instituto y se quedasen con sus fondos, Max Horkheimer los depositó en los Países Bajos, creando una sucursal en Ginebra, para la que fue nombrado Director Herbert Marcuse. En 1934 éste se trasladó a París, ya convertido en destacado investigador de la Escuela de Francfort.

En julio de 1934, su condición radical y el origen familiar judío le llevó a huir del nazismo, exiliándose en los Estados Unidos, donde se reencontraron los pensadores del IfS, dando vida en la Universidad de Columbia a la Escuela de Francfort. Allí, durante una década, Marcuse trabajó en la divulgación del pensamiento dialéctico en los Estados Unidos, con una significativa influencia en el espacio académico. 

Publicó en 1940 un trabajo titulado Reason and Revolution (“Razón y Revolución”) en el que defiende la decisiva contribución de la filosofía negativa y la dialéctica hegelianas al surgimiento de la teoría crítica de la sociedad. Marcuse rechazó la teoría de lucha de clases puesto que, según Leszek Kolakowski, “todas las cuestiones de existencia material habían sido resueltas, los mandatos morales y prohibiciones ya no eran relevantes”. Consideraba la realización de la naturaleza erótica del hombre como la verdadera liberación de la humanidad, lo que inspiró las utopías de Jerry Rubin.

En ese mismo año de 1940 Herbet Marcuse adoptó la nacionalidad estadounidense y dos años más tarde los Marcuse se trasladaron a Washington D.C., donde Sophie trabajó primero como estadística para la Oficina de Nutrición Humana y Economía Doméstica, dependiente del Departamento de Agricultura, y más tarde en el Servicio Naval de Inteligencia de la Armada.

En 1942 Herbert Marcuse trabajó inicialmente para la Oficina de Información de la Guerra  (OWI) y un año después es transferido a la unidad precursora de la CIA, la Oficina de Servicios Estratégicos (OSS), en la que se encontró con su compañero de la Escuela de Francfort, Franz Leopold Neumann, quien trabajaba como analista senior. Poco después, Marcuse se convertiría en el analista principal de estrategia sobre Alemania hasta 1951, cuando se retira al fallecer su esposa Sophie.

En 1952 inició su carrera como profesor de Teoría Política en la Universidad de Columbia y poco después se incorpora a la Universidad de Harvard,  que abandona en 1958 por discrepancias de la Dirección con sus trabajos.

En 1955 publicó Eros and Civilization: A Philosophical Inquiry into Freud (“Eros y Civilización”) en el que critica la sociedad capitalista sintetizando los pensamientos de Marx y Freud. El libro lo dedicó a la memoria de su primera esposa, Sophie.

En 1956, Herbert Marcuse se casó con Inge Neumann, viuda de su gran amigo Franz Neumann, que había fallecido dos años antes en un accidente de automóvil.

También en 1956 Marcuse hizo una visita a Francfort donde conoció a Jürgen Habermas, quien se sorprendió al saber que su visitante había sido uno de los miembros destacados de la Escuela de Francfort, a la que él ahora pertenecía.

En 1958 aparece su ensayo Soviet Marxism: A Critical Analysis (“Marxismo Soviético”) en el que partiendo de las teorías revisadas de Marx y Engels, Marcuse deduce que el análisis de la disminución del potencial revolucionario del movimiento obrero europeo y la socialdemocratización de los partidos comunistas son, a la vez, causas y efectos de la política soviética.

En 1964 publica One-Dimensional Man (“El hombre unidimensional”), con el que desea expresar su posicionamiento ante las protestas estudiantiles de la época. En la introducción Marcuse resalta la importancia vital del trabajo de su amigo C. Wright Mills, profesor en la Universidad de Columbia, donde dictaba clases de Sociología. C. Wright Mills fue uno de los fundadores del movimiento de la Nueva Izquierda. En su ensayo Repressive Tolerance (“Tolerancia represiva”), que apareció en 1965, Marcuse concluye que lo que es proclamado y practicado como tolerancia en esos años ayuda a la causa de la opresión en un muchas de las manifestaciones más eficaces. Es en 1965 cuando la Universidad de Brandeis no le renueva el contrato por su supuesta ferocidad en sus clases.

1968 fue un año turbulento durante el cual perecieron asesinados Robert Kennedy y Martin Luther King, la Unión Soviética invadió Checoslovaquia y los norvietnamitas lanzaron la ofensiva del Tet que marcó el inicio de la derrota estadounidense. Nuevos líderes estudiantiles como Daniel Cohn Bendit en Francia y Rudi Dutschke en Alemania alzaron la voz de una nueva generación que venía decidida a cambiar la vida, a derribar las viejas estructuras sociales y germinar un orden más justo. 

Las revueltas estudiantiles señalaban a Marcuse como mentor. Él sostenía que los productos materiales de la alta tecnología se habían convertido en el fundamento del conformismo y la docilidad. Estados Unidos era un país unidimensional, en su criterio, donde habían desaparecido todas las opciones alternativas de pensamiento o conducta. La sofocante sociedad creada necesitaba un gran rechazo; el hombre rebelde sartreano era el arquetipo de actuación que proponía. Los jóvenes de todo el mundo leyeron ávidamente sus libros: El hombre unidimensional, Eros y civilización y Contrarrevolución y rebelión. En las universidades las ideas de Marcuse eran el combustible que alimentaba la insurgencia civil.

Pronto es conocido por la prensa como el ‘Padre de la Nueva Izquierda’, a lo que responde diciendo que sería más propio que se le considerase el ‘Abuelo de la Nueva Izquierda’, ya que sostiene que los estudiantes no están esperando para actuar a que él publique un manifiesto. Sin embargo, es un hecho que sus obras influyeron significativamente en el discurso intelectual de la cultura popular estudiantil. Fue un referente teórico para los movimientos juveniles de protesta, como el movimiento hippie. A fínales de los ’60 y principios de la década siguiente Marcuse fue invitado a pronunciar conferencias tanto en EE.UU. como en otros países occidentales. Contribuyó a una intensa reflexión que se difundió en todo el orbe universitario y prendió en las masas, en la inquieta década de los sesenta, cuando alcanzó tal notoriedad que se llegó a hablar de las 3M: Marx, Mao y Marcuse.

Se incorpora en 1965 a la Universidad de California en San Diego, en la que permanece  hasta su jubilación en 1977. En plena guerra de Vietnam, recibe Marcuse una amenaza de muerte y dos de sus colegas Avrum Stroll y Gabriel Jackson deciden acompañarlo todos los días en su desplazamiento de quince minutos desde su casa en Ave. Cliffridge hasta el campus de La Jolla, que aprovechaba Marcuse para hablar de sus compositores preferidos, Mahler y  Bruckner, evitando de este modo hablar de sus posicionamientos ideológicos. Sin embargo en uno de esos breves paseos comentó a sus acompañantes que junto a sus ideas hegelianas-marxistas-freudianas creía igualmente en una especie de teoría de la historia del gran hombre, y por eso le había inquietado la evolución política de Unamuno desde adversario de la dictadura de Primo de Rivera a impaciente amigo de la República, para pasar a defensor del alzamiento del 18 de julio en los primeros días.

En 1972 fallece Inge Neumann, segunda esposa de Herbert Marcuse. En 1976 se casa en terceras nupcias con Erica Sherover, conocida como Ricky, una de sus alumnas en la Universidad de San Diego, 40 años más joven que él.

En 1977 Marcuse protestó por el arresto el 25 de agosto de 1977 en Alemania Oriental de Rudolf Bahro por haber publicado su libro Die Alternative: Zur Kritik des real existierenden Sozialismus (“La Alternativa en Europa del Este”), una crítica del socialismo existente en la R.D.A.

En 1979 Marcuse visita Alemania. Una bronconeumonía y un ataque al corazón le llevan al quirófano en Francfort. Pareció recuperarse y en su agenda para el 29 de julio en Francort Marcuse tenía dos conferencias previstas: en el Römerberggespräche (“Las conversaciones de Römerberg”) y a continuación otra en la Sociedad Max Planck para la Promoción de la Ciencia, invitado por Jürgen Habermas, perteneciente a la segunda generación de la Escuela de Francfort. Tras pronunciar la primera y de camino a la segunda sufrió un infarto, del que no pudo recuperarse. 

Su tercera esposa, Inge Neumann (Ricky), decide incinerar el cuerpo de su marido en Austria, porque ella decía que en Alemania ya se había quemado suficientes judíos. La urna conteniendo las cenizas de Marcuse fue enviada a una funeraria de Connecticut, puesto que las autoridades estadounidenses prohibían enviarlas a domicilios particulares. Ricky fallece en 1988 sin informar a la familia de Herbert Marcuse a dónde habían ido a parar las cenizas de éste. 

Un buen día, Harold Marcuse, nieto de Herbert Marcuse, recibe en su correo electrónico un mensaje de un profesor belga preguntándole dónde estaba enterrado su abuelo. Harold Marcuse inicia sus pesquisas y finalmente localiza la urna. La familia se pregunta dónde deben ser depositadas y se las ofrecen a Berlín, cuyas autoridades municipales son socialdemócratas y ex-comunistas. Devotos de sus ideas, aceptan encantados y ofrecen una tumba de honor en el cementerio de Dorotheenstädtischen, donde también reposan Georg Wilhelm Friedrich Hegel y Bertolt Brecht.

Harold Marcuse, profesor de Historia moderna y contemporánea de Alemania en la Universidad de California, acepta el ofrecimiento con las siguientes palabras: “Mi abuelo cultivó un marxismo crítico y creativo, y ese es un buen lugar para él”. Recibidos los restos de Herbert Marcuse en Berlín, son paseados por la ciudad y trasladados al camposanto en una limusina Cadillac del año ‘66, propiedad de un empresario viejo revolucionario del ’68, que la guardaba en el Museo Técnico de la ciudad. El coche fúnebre había sido utilizado antes para transportar los restos de Marlene Dietrich, otra exiliada que regresó a Alemania después de muerta, y los de Benno Ohnesberg, el estudiante que fue abatido en junio de 1967 por la policía durante una protesta por la visita del Sha de Persia, Reza Pahlevi, 

En el funeral de Herbert Marcuse hablaron su hijo Peter, su nieto Harold y su antigua alumna y activista,  Angela Davies.

He aquí una relación de los escritos de Herbert Marcuse:
  • Entre hermenéutica y teoría crítica. Artículos 1929-1931(2011) 
  • Sobre Marx y Heidegger. Escritos filosóficos 1932-1933 (2016) 
  • Acerca de los fundamentos filosóficos del concepto científico-económico del trabajo (1933)
  • The Struggle Against Liberalism in the Totalitarian View of the State (1934)
  • Razón y revolución (1941)
  • Eros y Civilización (1955)
  • El marxismo soviético (1958)
  • El hombre unidimensional (1964)
  • Tolerancia represiva (1965)
  • Cultura y Sociedad (1967)
  • Acerca del carácter afirmativo de la cultura (1936)
  • El final de la Utopía (1967)
  • La sociedad industrial y el Marxismo (1968)
  • Un ensayo sobre la liberación (1969)
  • Psicoanálisis y política (1969)
  • Ética de la Revolución (1970)
  • La Sociedad Opresora (1972)
  • Contrarrevolución y Revuelta (1972)
  • The Aesthetic Dimension (1977)
  • La agresividad en la sociedad industrial avanzada y otros Ensayos (1979)
  • Protosocialism and Latecapitalism. Toward a theoretical synthesis Based on Bahro's Analysis
  • Guerra, tecnología y fascismo. Textos Inéditos. (2001)



MAG/19.11.2018